Los huevos puestos por las gallinas de Livorno son los huevos más comunes y conocidos con una cáscara blanca. Se cree que el color blanco de la cáscara indica un menor contenido de colesterol o grasa que los huevos marrones. El color, de hecho, no afecta de ninguna manera las propiedades nutricionales del huevo, que son idénticas a las de otras razas. La coloración de la cáscara depende del hecho de que poco antes de la deposición una glándula particular segrega un líquido lubricante cuya composición varía de raza a raza y dentro de esta entre gallina y gallina para que la misma gallina pueda poner huevo con coloración más o menos intensa.